Gwen se sentía sola, triste y abarrotada. ¿Cómo es posible que
unos días atrás tuviera tantas ganas de hacer de todo, de salir y comerse el
mundo, de demostrar todo lo que puede hacer… y sin embargo, ahora estar tan
apagada?
Realmente, ¿ella está tan mal que depositaba casi todo su
bienestar en ese chico? Hablaban cada día, se lo contaban todo, iba a dormir y
se levantaba pensado en él… Un desengaño. La ignora.Esos cachitos donde me expreso mediante palabras. Historias, poemas, reflexiones...
martes, 24 de marzo de 2015
domingo, 22 de marzo de 2015
Martha e Ricardo I
Un escritor se encuentra ante la situación de querer narrar las historias, problemas y anécdotas de su dia a dia pero el miedo a poner en poder de otros sus sentimientos le impide avanzar...
A Martha le encanta escribir, siempre le ha
gustado pero por una serie de hechos muy interesantes, que ahora no
averiguaremos, el último año se ha centrado más en reflejar sus pensamientos y sentimientos
en el papel. Bien, pues de éste último año que ha cogido la cosa más fuerza, el
último mes ya es algo, podría decirse, adictivo. Tras descubrir que podía
compartir sus escritos con todo el mundo a través de internet todas las
tardes se conectaba al ordenador i buscaba cosas como "web de
escritura", "compartir historias" o "página web dónde
publicar relatos". Al mismo tiempo se creó una nueva cuenta
de Twitter, ya tenía una pero hacía mucho que no entraba y prefería
empezar de nuevo. Allí empezó a seguir mucha gente del mundillo de la
escritura, sin ser autores de libros o de famosos best-sellers, pero sí gente
que la podría ayudar con la escritura en la red. Pues buscando en la red
encontró varias páginas dónde uno se registraba y podía colgar sus escritos. En
el perfil de ésta página puso su Twitter para ganar más seguidores, igual
que en la cuenta de Twitter dónde anunciaba el perfil del portal de
escritura. Su primer escrito fue un poema dedicado a su abuelo, que hacía un
par de meses que falleció. El poema era claro, sin metáforas ni paralelismos,
citaba claramente la muerte de su abuelo. Pero en realidad no era su abuelo el
que murió, sino el de Ricardo Gómez. ¿Quién era, es, ese tal Ricardo?
Bella flor que te consumes
Bella flor que te consumes,
Tu reinado a su final se acerca.
Bella flor que te consumes,
El miedo al dolor del vacío nos acecha.
Bella flor que te consumes,
¿Dónde se encuentran los tiempos de abundancia y totalidad?
¿Significa ésta, su ausencia, un adiós para siempre?
Bella flor que te consumes,
La imagen de tus acurados pétalos ahora desaparece,
Y eso a mucho pesar entristece.
Bella flor que te consumes,
Las muchas primaveras que has vivido,
Los muchos fríos inviernos que has resistido.
Bella flor que te consumes,
Dinos, por favor, que aún no abandonas tu reino,
Dinos, por favor que la luz de un nuevo día
Será la que ponga fin a este tormento.
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